Una de las piezas clave en tu visita a la ciudad de Alicante y que es de parada obligatoria es la basílica de Santa María. Como muchas otras iglesias, ésta también nace de los cimientos de una antigua mezquita, considerada una de las más grandes de la ciudad en su época. La purificación de esta mezquita tuvo lugar en el siglo XIII durante el reinado de Alfonso X. A finales de este siglo Jaume I mandó construir en el lugar donde se encontraba la mezquita una nueva iglesia conocida como la Madonna d´Alacant. Esta construcción tendría dos funciones, tanto de culto religioso como fuerte militar y punto vigía entre la costa y la huerta.
Ya en el siglo XV se tiene constancia de un gran incendio que acabó con lo que se conocía de Iglesia. Por suerte de este gran incendio se salvó la imagen de la virgen. Así pues desde 1480 a 1530 se llevó a cabo la construcción del templo que actualmente conocemos. Está construido en el estilo tardo-gótico. Uno de los elemento a destacar de este templo es la capilla de la Virgen de piedra que conserva un arcosolio isabelino y que finalmente acabó formando parte de la portada principal. Sin embargo esta iglesia intentó conseguir la ser la Colegiata de la ciudad (título que concedía el papa) que finalmente se la otorgó a la de san Nicolás. Así pues tras ello, la iglesia de santa maría se vuelca con los barrios de marineros y convirtiéndose en Santa María del Mar.
Tras los bombardeos sufridos en los asedios en los siglos XVII y XVIII, se lleva a cabo la reconstrucción definitiva de cómo hoy día la conocemos bajo la dirección de Juan Bayona. Uno de los elementos más característicos de esta iglesia es la portada principal de estilo barroco alicantino. Sobre el dintel encontramos un acrónimo del ave María y unos querubines, a los lados unas columnas muy decoradas y al fondo encontramos a Dios coronando a la virgen. Esta composición se finaliza con el escudo de Alicante en lo alto. Pero como todo edificio con el paso del tiempo se llevaron a cabo otras reformas con la de la capilla del corpus Cristi o la talla del relieve de juan de Borja narrando el incendio que sufrió la iglesia en el pasado.
Sin embargo durante la guerra civil, como la mayoría de iglesias, la de santa María del Mar fue utilizada con almacén militar. Por suerte no sufrió muchos desperfectos pues nada más acabar la guerra se llevó a cabo su reconstrucción creándose nuevos altares y consagrándose como epicentro de la semana santa.
En 2007 se le concedió el título de Basílica tras una petición por parte del ayuntamiento a la Santa Sede.
Para conseguir más información acerca de la Basílica de Santa María puedes visitar los siguientes enlaces:
Santamariadealicantepdfdefinitivo
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